El huracán Katrina podría ser el argumento para un pastelón de sobremesa y llorera. Seguro que a muchos directores se les ha pasado por la cabeza contarnos cómo fue la destrucción de Nueva Orleans, las olas arramblándolo todo, la salvación de unos, la muerte de otros... Eso sería lo obvio, lo sensiblero, lo fácil y comercial. Pero David Simon y la HBO siempre dan algo más. La serie finalizó tras una breve cuarta temporada. Inolvidable.
Treme es un barrio de Nueva Orleans y por sus calles caminan los personajes de la serie, todos afectados de una u otra forma por el huracán Katrina (2005), que ha arrasado gran parte de la ciudad tan sólo unos meses antes del comienzo de la primera temporada.
Michiel Huisman.
Como ya hizo en 'The Wire', Simon cuenta historias realistas en una serie coral. Los personajes principales son la ciudad misma, la música, importantísima, y la gente. Y cuando digo gente me refiero a los vecinos de toda una ciudad conmocionada que trata de levantarse después del desastre. Simon coge su lupa periodística y nos enseña algunos casos concretos, a algunas personas (no "personajes", diría yo, porque aquí vemos personas de verdad) y sus vidas vueltas del revés tras el Katrina. Y eso le sirve para protestar. Simon no se queda en mostrar las pequeñas historias sino que utiliza la serie para señalar a los culpables, para enseñar lo mal que las distintas administraciones hicieron las cosas tras la catástrofe. Este es el sello de Simon, su manera de hacer televisión y lo que lo distingue del resto.
Batiste.
'Treme' es una serie de personajes y todos tienen ese "algo" que los hace importantes. Sus historias se entrecruzan en mayor o menor grado y nos enseñan las distintas maneras que tienen de levantar cabeza tras el Katrina. A los que ya habéis visto 'The Wire' os sonará más de una cara: Simon recupera a Clarke Peters y a Wendell Pierce (Lester Freamon y 'Bunk' en 'The Wire', respectivamente), ambos encarnando ahora papeles de ciudadanos "castizos" de Nueva Orleans. El primero hace de Albert Lambreaux, un jefe indio del Mardi Gras, que no quiere que el Katrina le impida participar en el famoso carnaval; el segundo es un músico, Antoine Batiste, que tras el huracán lo tiene difícil para sobrevivir con su trombón.
A ellos sumamos un fichaje de pantalla grande, John Goodman, cuyo personaje vive indignado por cómo se está gestionando la ciudad desde la catástrofe. Su mujer, interpretada por Melissa Leo, es una abogada que ayuda como puede a sus vecinos dentro del caos burocrático que reina en la ciudad, y sirve así de punto de conexión entre varios personajes de la serie.
Un eterno secundario del cine, Steve Zahn, es aquí un músico enamorado de su ciudad, Davis, algo locuelo, amigo de Janette, una cocinera que lucha por mantener abierto su restaurante en plena crisis, y cuyo papel corre a cargo de Kim Dickens ('Deadwood', 'Fear the Walking Dead'). Y podría seguir, porque personajes hay para echar el día hablando de ellos, todos creíbles y que pronto se hacen familiares al espectador. También reconoceréis a un actor de 'Juego de Tronos', Michiel Huisman.
El jefe Clarke Peters.
La música es vital en 'Treme' y salpica cada capítulo, cada esquina del barrio, con muchos músicos reales que participan haciendo de sí mismos y dando así todavía más realismo a la serie. Vemos a Kermit Ruffins (aquí os pongo un enlace de Spoty a uno de sus discos), Trombone Shorty (disco), Coco Robicheaux (disco) y hasta el propio Elvis Costello. Nueva Orleans sobrevive a pesar de todo y la música es una especie de motor, el primero que se enciende después de la catástrofe. Y con la música llega el Mardi Gras, otra muestra más de lo distinta (y francesa, y africana) que es esa esquinita de Estados Unidos con respecto al resto del país.
La serie es de las imprescindibles, de las inolvidables. 'Treme' es una serie de personajes, de ritmo lento pero seguro, de historias sencillas y creíbles, de drama, supervivencia y buenos momentos, todo mezclado con buena música y mejor rollo. Espero que la disfrutéis y hablemos de ella durante algunos años.
Pues aunque el piloto me pareció un poco aburrido cada capitulo que pasa disfruto más. Enormes todas las apariciones, aunque breves, de John Goodman! El momento en el que se graba para youtube es tremendo jaja
Pasa como en The Wire: son series de digestión tranquila... te van enganchando poco a poco, conforme vas conociendo a los personajes y los haces algo tuyo.
Pues aunque el piloto me pareció un poco aburrido cada capitulo que pasa disfruto más. Enormes todas las apariciones, aunque breves, de John Goodman! El momento en el que se graba para youtube es tremendo jaja
ResponderEliminarGoodman es un crack! :D
ResponderEliminarPasa como en The Wire: son series de digestión tranquila... te van enganchando poco a poco, conforme vas conociendo a los personajes y los haces algo tuyo.