No hay mejor drama que el familiar, aunque en este caso haga equilibrios en la cuerda floja, con un riesgo casi constante de caer en el melodrama. Y alguna vez cae. A esto suma buenos personajes, que multiplica temporalmente en sus distintas versiones y edades para diseccionarlos yendo al origen, al detalle, al momento en el que los pasos que dan los van convirtiendo en ellos mismos. Un poco lioso, ahora que leo lo que he escrito, pero ahora entraremos en detalle. La serie tendrá al menos dos temporadas más.